Sin gesto alguno de arrepentimiento la presidenta del partido Demócrata de los Estados Unidos presentó su renuncia al cargo tras la publicación hecha por Wikileaks de 19,252 correos electrónicos. Pruebas de favoritismo hacia la campaña de Hillary Clinton en comunicaciones entre siete figuras clave del DNC, Comité Nacional Demócrata por sus siglas en inglés, fueron la causa de la dimisión. Retiro que se hará efectivo una vez concluya la convención de esta semana en la que Clinton será oficialmente elegida como candidata del partido.
“La mejor forma para mi de cumplir esos objetivos – apoyar la campaña de Clinton – es renunciar a mi puesto de presidenta del partido al finalizar la convención” aseguró Debbie Wasserman Schultz. Las pruebas hacían imposible la negación de cualquier favoritismo a los candidatos participantes en las primarias pero por lo dicho se demuestra que no habría intensión alguna de siquiera justificar lo sucedido.
Preguntas giran en torno a la revelación de esos correos electrónicos, las intensiones varían según la perspectiva desde la que se observe. El escenario deja como “culpables” de lo sucedido a las siete personas que enviaron los correos, pero, ahora el cuestionamiento gira entorno a quiénes son los responsables de que el contenido de los mismo ahora sea de conocimiento público. “Los rusos están liberando esos correos electrónicos para ayudar a Trump”, aseguró el jefe de campaña de Clinton quien además trajo a colación una infiltración de hackers a la plataforma Web del DNC la cual está siendo investigada por el FBI. “El FBI está investigando una ciber intrusión que envuelve al DNC y está trabajando para determinar su naturaleza y el alcance de la materia”, confirmó la agencia este lunes a través de un comunicado.
Bernie Sanders, el mayor afectado por este hecho, víctima de burlas en los correos y quien además denunció preferencias del partido hacia su contrincante en las primarias, aseguró: “Conmigo Nadie se ha disculpado”.
La reputación del partido queda en entredicho y deja en mala posición la campaña de la candidata Demócrata quien tiene por delante una gran batalla que dar. Las últimas encuestas realizadas demuestran una ventaja de 6 puntos porcentuales de Donald Trump sobre Hillary Clinton quien contaría con un apoyo del 45% de los encuestados. La convención Republicana, pese a haber sido criticada por muchos, parecería haber ganado votos de los independientes que aún no habían dado a conocer su intensión de participación.
Lo preocupante ahora para los demócratas es ¿qué otras sorpresas se vienen de parte de Wikileaks? Según lo consignado en el portal esta es solo “la parte uno de la nueva serie de filtraciones de Hillary Clinton”.